Desde el 1 de enero
Las pensiones no contributivas amplían su umbral de compatibilidad con el trabajo
Desde el 1 de enero de 2016, las pensiones no contributivas de la Seguridad Social, en su modalidad de incapacidad, han elevado el umbral de condiciones de compatibilidad de la prestación con la realización de un trabajo o la percepción de ingresos derivados de procesos formativos.
Desde el 1 de enero de 2016, las pensiones no contributivas de la Seguridad Social, en su modalidad de incapacidad, han elevado el umbral de condiciones de compatibilidad de la prestación con la realización de un trabajo o la percepción de ingresos derivados de procesos formativos.