ACIME-Extremadura, encabezada por el delegado Rufino Batalla, ha sido la encargada de organizar en esta ocasión el viaje anual de la asociación, una ruta con «sabor extremeño».

El viaje, que tuvo lugar entre los días 2 y 6 de octubre comenzó en Madrid, donde el autobús puso rumbo a Badajoz, primer destino. Los socios visitaron esa misma tarde Olivenza. Vuelta al hotel y, a la mañana siguiente, visita a Mérida, capital extremeña, donde nuestros compañeros disfrutaron de la visita al museo romano, el teatro y el anfiteatro.

A mediodía dejaron atrás la antigua Emérita Augusta para dirigirse a Cáceres, ciudad monumental. El tercer día de viaje se lo reservaron a Guadalupe donde, además de disfrutar del monasterio, los socios de ACIME degustaron una estupenda comida en el restaurante de la Hospedería del Real Monasterio. Tarde libre y vuelta a Badajoz.

El día 5, y de nuevo en Badajoz, tuvo lugar la celebración del día de nuestro patrón, San Rafael, con una misa en su honor oficiada en la catedral y la posterior comida de convivencia. Por la tarde pequeño viaje a Elvas, una localidad de nuestra vecina Portugal.

El tour por Extremadura terminaba el día 6 en Almendralejo, con una visita a las bodegas Viñexa. Un viaje inolvidable tanto por los lugares descubiertos, como por la gastronomía local, como por la compañía y, por supuesto, por la exquisita organización de la delegación de ACIME en Extremadura. ¿Próximo destino?